Muchos estudios demuestran que la vitamina D puede mejorar algunos problemas mentales. La depresión y la demencia, siendo la enfermedad de Alzheimer su forma más conocida.
En el cerebro hay muchos receptores de vitamina D, que aumentan el crecimiento de células nerviosas en el tejido neuronal del cerebro.
Esta vitamina, que debería ser considerada mas bien una hormona, actúa a diferentes niveles. También ejerce efectos beneficiosos en el cerebro gracias a sus propiedades anti-inflamatorias e inmunomoduladoras.
Relación entre la depresión, la demencia y el déficit de vitamina D
Las personas ancianas suelen presentar bajos niveles de vitamina D. Este hecho puede multiplicar por dos el riesgo de padecer demencia y Alzheimer. Cabe destacar la controversia sobre los niveles ideales de vitamina D en sangre, que según muchos expertos son demasiado bajos. En vez de un nivel mínimo de 30, se suele recomendar no dejar pasar sus niveles por debajo de 50. En este estudio en comparación con aquellos con niveles de vitamina D en el rango normal:
Aquellos con niveles de vitamina D demasiado bajos, aumentaron el riesgo en un 53 % de padecer una demencia senil, y en un 70 % mayor de padecer la enfermedad de Alzheimer.
Sujetos con déficit grave de la vitamina presentaban un riesgo aumentado en un 125 % en el caso de la demencia y un riesgo 120 % mayor en lo que concierne Alzheimer.
Otro autor ha encontrado recientemente relación entre la depresión y la demencia, así como entre el déficit de vitamina D y la depresión. Rush University Medical Center realizó un estudio donde se vio que los niveles más altos de depresión se traducían en un riesgo más elevado de demencia futura. La gravedad de la depresión pudo ser relacionada a la velocidad del declive de la memoria—cuanto mas grave y aguda era la depresión , más rápido procedía el declive de la memoria.
La deficiencia de Vitamina D favorece la aparición de depresión
Adultos con bajos niveles de vitamina D fueron 11 veces más propensos a padecer una depresión que los que presentaban niveles normales. Los resultados se publicaron en un artículo de la revista Times Online:
„La investigación Amsterdam, que evaluó a más de 1,200 personas de 65 a 95 años, mostró que los niveles de vitamina D en la sangre fueron 14 por ciento más bajos en las personas con depresión mayor y menor en comparación con los participantes no deprimidos. Un estudio realizado en los Estados Unidos indicó que la deficiencia de vitamina D se presentó con más frecuencia en ciertas personas, incluyendo en los afroamericanos, personas que viven en la ciudad, los obesos y los que sufren de depresión. Las personas con niveles de vitamina D inferiores a 20 ng/mL tuvieron un riesgo de 85 por ciento mayor de depresión en comparación con las personas con niveles de vitamina D superiores a 30 ng/mL”
Un estudio publicado en 2008 llegó a la siguiente conclusión:
“Parece haber una relación entre los niveles séricos de Vitamin D3 y los síntomas de la depresión. La suplementación con altas dosis de vitamina D parece mejorar estos síntomas, indicando una posible relación causal.”
La hipovitaminosis D ha sido relacionada con muchas enfermedades como el cancer de mama, los canceres en general, la diabetes, el Trastorno Afectivo Estacional y la fibromialgia.